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Utopía Urbana se
presentó en el GisJuglar con la obra No
Mamenaces, el pasado 10 de junio de 2017. Gracias a la gestión de Maia Andrea tuvimos
la oportunidad de conocer a la agrupación teatral en el contexto de las
reuniones del Grupo Interdisciplinario de Sexualidad.
El
título de la obra No Mamenaces se
presta para pensar en diferentes escenas comunes, y donde el gesto de la
amenaza, de la percepción del riesgo implica la repuesta “¡no me amenaces!”.
¿Cuál es la amenaza? Los planteamientos que exponen a través de la obra fueron
provocadores: equidad de género, violencia, liberaciones, una historia escrita por Armando Flores.
En
la historia que nos cuenta Utopía Urbana se recrea cómo se gesta el círculo de
la violencia que se hila de manera constante, que se expresa en diferentes
formas y dosis, y donde los puntos nodales en la hilaza son el perdón y el
golpe. La historia contada por los actores Roberto Vázquez y Janis Alatriste tiene un final con una propuesta: la reflexión en torno al círculo o la espiral
de violencia, este último como dice María J. Rodríguez Shadow; y la liberación.
En el noviazgo, la pareja es quién reproduce el círculo, en el matrimonio cada
uno de los miembros de la familia lo reproducirán hasta que alguno desee, quiera, pueda salir de la espiral.
Las mujeres son víctimas pero también los hombres que viven sus miedos, sus
rencores, sus celos, emociones que no controlan y les producen dolor.
Los actores
experimentan la vida de la otredad, encarnan las emociones de sus personajes, y
entonces, ¿qué sienten por ellos, odio, amor, repugnancia, agradecimiento?
Con
los pasos que se han dado por la erradicación de la violencia hacia las mujeres
se han desencadenado desafíos, retos que le incumben a las sociedades
machistas, misóginas, sexistas, retos que implican reconocer que las relaciones
personales pueden experimentarse sin violencia. Esto no es nuevo, otras
personas lo han puntualizado. En el siglo XXI nos vemos en coincidencia, por
ejemplo, con María J. Rodríguez Shadow cuando se plantea la pregunta ¿por qué
continua la violencia hacia las mujeres?, ella responde [léase en la revista Vertientes, 2017], y el resto de la “familia
mexicana”, ¿qué ha pensado?
La
obra No Mamenaces es una manera de
contar historias de cambio, ejemplos que dan cuenta de cómo las personas encuentran
las condiciones, las motivaciones y los deseos para cambiar comportamientos,
creencias, conductas, patrones, contenidos que impiden la erradicación de la
violencia. Click.
El
círculo de la violencia en el noviazgo, en la relación matrimonial que viven
las mujeres, que viven las parejas o las familias comenzó a vislumbrarse con
las primeras escenas. La historia que veíamos, que escuchábamos nos pedía un
final, la denuncia de la violencia en las relaciones de familia y en el noviazgo.
Sin embargo, no quedó ahí lo que sucede. Un parte aguas de la historia de No Mamenaces fue la posibilidad de
liberarse. Pero, ¿liberarnos?, ¿cómo, cuándo, de qué y para qué?, ¿qué se
requiere para plantearse la liberación?, ¿qué partes de nuestras culturas
tenemos que dejar de usar para liberarnos, de la violencia?, estas son preguntas
que cada persona encuentra en su interior, pero, ¿cómo?
¿En nuestra vida cotidiana
cuántos más se suman al cambio?
Después
de la obra, Utopía Urbana se quedó a platicarnos de sus experiencias, de su
trayectoria, de cómo las personas externaban lo que pensaban de las historias
que cuentan. Una pregunta que detonó la conversación fue, ¿el teatro cura?
En
esta invitación, para conocer el trabajo de Utopía Urbana, les dejo algunas
evidencias del gesto de actores y espectadores en la presentación NO Mamenaces, cada uno experimentando la
historia.
15 de julio 2017
Norma Páez
npaezgalicia@yahoo.com.mx
Instituto Interdisciplinario de Estudios Aplicados Lou Andreas Salomé, A.C.