Alerta de Violencia de Género
Mujeres
La
Organización de Naciones Unidas define Violencia de Género al “considerar que
toda persona puede ser víctima de actos de violencia, pero el sexo se convierte
en uno de los factores que aumenta de modo significativo su vulnerabilidad”
¿Qué implica para nosotras la Alerta de Violencia de Género?
Mirarnos.
Voltear, contarnos y ver quién falta, quiénes faltan. Darnos cuenta que
nuestras diferencias no nos hacen criminales ante nadie, existimos y estamos
una al lado de la otra: pensamos, vestimos, comemos, deseamos diferente,
tenemos derechos, podemos amarnos y hermanarnos. La desconfianza y la
competencia son fuerzas que nos individualiza y nos vulneran frente a quienes nos
miran como blancos para la destrucción: a las jóvenes, a las hermanas, a las
mujeres… las miran con odio. ¿Cómo romper con lo que nos divide? Reconociendo
en nuestra cultura lo que impide que nos liberemos. En las ideologías, en las
creencias, en el lenguaje se encuentran las formas de violencia que dejamos que
se reproduzcan, al reconocerlas se puede ir contra el terror que se expande
desde hace mucho, juntas podemos de manera coordinada, sistematizada, articulada,
con la mayoría y la fuerza para cuestionar lo que se dice que es nuestra culpa.
Se nos acusa de ser las reproductoras de los “usos y costumbres” del machismo,
del patriarcado, aun cuando la violencia se manifiesta en diversas maneras
para someter e invalidar los derechos de
las mujeres, para naturalizar su obediencia al sistema patriarcal.
El verdugo hace la mueca del placer.
A caricia y flagela.
Mata en silencio.
Se extiende el olor a muerte, nos ha invadido en silencio, apesta a carne
en descomposición. Se instaló en nuestra sangre, se nos inyectó el “amor
romántico”, sometidas sin oponer resistencia solo obedecen. Quedó asentada y
legitimada la obediencia, la soledad, el aislamiento. Ellas también son
guardianas y carceleras, vigilan la prisión, las esposas las aprietan ellos.
¿Por qué?
Las personas del pasado construyeron los mecanismos que han justificado y
ocultan la violencia hacia las mujeres. Son responsables y murieron sin
admitirlo o reconocerlo; generaciones tras generaciones en silencio niegan sus
responsabilidades, no han respetado las vidas de quienes han sido vulnerables
al desprecio, al odio, al placer que gozan al destruir-las. ¿Por qué? En la historia de la humanidad los asesinos no
tienen nombre, están ahí, siempre, mirando, esperando, machos, misóginos,
hombres que descargan, sus vacíos, su ego nunca satisfecho. No hay palabras que
los describan. El odio los hermana para sostener el sistema que las
mata, que las hace su botín de guerra, se encubren unos a otros, así quedan
impunes sus crímenes.
Ellas,
asesinadas,
descuartizadas,
mutiladas.
obligadas a callar,
porque están locas, dicen…
porque están pobres…
porque no tienen hermanas.
Están pobres porque estamos solas.
Vulnerables.
Tenemos miedo
Tuve miedo de aquel que miraba con desprecio. Dos mujeres se besaban y por
eso fueron odiadas. Su odio irradiaba por todo su cuerpo, su mirada se clavó en
ellas. Yo lo miraba… él las odiaba cada vez más, sin dejar de mirarlas
desapareció entre la muchedumbre que nada vio.
Ellas
desaparecen sin dejar rastro
¿Violencia sistemática?
¿Cuál es tu testimonio? El colectivo de mujeres de San Cristóbal, Chiapas,
COLEM, anunció que en el 2012 se registraron 200 mujeres víctimas de asesinos
sin nombres, declararon Alerta de
Violencia de Género. De Ecatepec se transportan los testimonios, de Oaxaca se
cuentan otros más. Las mujeres que lloran a sus hijas desaparecidas, cuando las
encuentran, partidas en dos, en pedazos mueren con ellas. El resto de sus
cuerpos están esparcidos sin nombre en los desechos de cualquier lugar. ¿El
aumento de los asesinatos es la respuesta al grito, “Derecho a decidir, es mi
cuerpo, es mi derecho”? Cualquiera es sospechoso.
Las sospechas aumentan. Los testimonios que se cargan a cuestas, con el
miedo en la garganta, no se gritan, se silencian, sólo se escuchan palabras
intentando salir, se evidencian las desapariciones pero no son suficientes para
decir que algo pasa. ¿Si no me pasa, no pasa?
¿Por qué declarar improcedente la declaración de Alerta de Violencia de
Género?
Hay descuartizadas, violadas, golpeadas, aisladas, desaparecidas,
asesinadas, no fallecidas. Fueron asesinadas, del resto nadie sabe, aun
así, dicen que es improcedente la declaratoria de Alerta de Violencia de Género.
Dicen que no hay evidencias suficientes.
La negación para el olvido
La negación de la existencia de la violencia hacia las mujeres es un
mecanismo que ha mantenido el sistema patriarcal, la negación es el aceite de
la maquinaria de la violencia. La
humillación acaba por destruir el intento por la libertad. El amor romántico es
veneno. Las educaron para ser amantes de sus victimarios, se les enseñó a
amarlos y pedirles perdón por su culpa, ¿cuál culpa?
¿Quiénes son
los asesinos y sus cómplices?
Norma Páez
26 de agosto de 2013
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